Por Andres Lobato
En los primeros días del año, desde el ministerio de Agroindustria confirmaron una noticia que movilizó a la cadena de ganados y carnes: la apertura de protocolos sanitarios con China para la venta de carne con hueso y enfriada.
Desde el oficialismo destacaron que esta medida permitirá diversificar las exportaciones bovinas al gigante asiático, principal cliente argentino. En concreto, mediante una teleconferencia entre el SENASA y su par chino, se llegó a un acuerdo preliminar, que debería ser rubricado en el transcurso de las siguientes semanas.
Conforme transcurrieron los días, trascendieron detalles en relación a puntos del acuerdo por este protocolo, que causaron preocupación en un sector de la industria frigorífica y de las casas consignatarias. En concreto, se trata de una solicitud formulada por China: que las vacas destinadas a ese mercado pasen los 90 días previos a la faena en el campo. El objetivo es evitar problemas con enfermedades como brucelosis y tuberculosis.
Las inquietudes no tardaron en llegar. ¿Podrá esa categoría pasar por remates ferias o por el Mercado de Liniers? ¿Significa esta medida un golpe para la comercialización fluida de la vaca?. Consultado por delsector.com, el analista Víctor Tonelli puso paños fríos a esta situación, y explicó cómo evolucionarán las negociaciones.
“En primer lugar, el importador delega los servicios sanitarios en el país comprador”, explicó, y agregó que en estos días se “está negociando un anexo en el protocolo sanitario”. De esta manera, y con el antecedente de Uruguay, que aplica un sistema similar al solicitado por China desde hace diez años, Tonelli afirmó que no existirán dificultades para comercializar esta categoría con China.
En esta sintonía, el presidente del Consorcio de Exportadores de Carnes Argentina (ABC) Mario Ravettino, confirmó que Argentina se encuentra trabajando en este anexo. “La idea es que entiendan que ofrecemos un producto que corresponde a los parámetros de la OIE (Organización Mundial de Sanidad Animal)”. Además, agregó que “hay una excelente relación política con China, que hay que aprovecharla”.
Con respecto al incremento de las exportaciones durante 2018, el directivo estimó que oscilará entre un 15% y 20%. “En la medida que tengamos animales de mayor peso, tendremos mayor volumen, es la gran deuda pendiente de la Argentina”, concluyó.