Para este año, el Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA) elaboró sus proyecciones, a partir de la información aportada por 15 industrias lácteas que reciben y procesan alrededor del 49% de la leche de Argentina.
Los datos preliminares indicaron una suba del 5,72% anual, con una producción estimada para 2025 en 11.190,2 millones de litros de leche. En 2024, este número fue de 10.590 millones de litros, que representó una caída interanual de 6.5%.
“Esta estimación sólo trata de brindar una perspectiva para el año 2025, sobre la base de los datos disponibles al momento de efectuarla”, señalaron desde OCLA. Y advirtieron: “las condiciones de alta volatilidad e incertidumbre que seguramente caracterizarán el año que recién iniciamos, pueden generar importantes diferencias respecto a los números proyectados”.
El informe también analizó cuales podrían ser los factores que pongan un techo a ese crecimiento. Uno de los puntos que mencionaron es la posibilidad de una reducción en los derechos de exportación en soja y otros granos, “que incrementarían los costos de alimentación y el valor de los arrendamientos rurales”.
En este punto, remarcaron que algo más del 50% de la superficie destinada a la producción de leche se realiza sobre campo alquilado. De este total, un gran porcentaje de los arrendamientos están pactados en valor soja.
Además, mencionaron otros factores como:
- La reducción en el número de vacas.
- El cese de unidades productivas.
- La continuidad en el crecimiento de la marginalidad.
- El retraso cambiario o pérdida de competitividad de nuestras exportaciones a pesar de los buenos precios en el mercado externo.