El encierre a corral atraviesa un momento de incertidumbre, y a los feedlots argentinos se les dificulta hallar un punto de equilibrio. De acuerdo al último informe de la Cámara Argentina de Feedlot (CAF), se desprenden algunos datos que muestran una preocupante situación.
El trabajo fue elaborado en 74 corrales afiliados a la cámara, y se pueden percibir una caída del 4% en los niveles de ocupación, que bajó del 67 al 63%. Con una capacidad de encierre de 507.800 cabezas al 1 de octubre, se registraron 61.000 bovinos en recría a corral, 78.000 cabezas en recría a campo y 49.000 ejemplares encerrados con destino a Cuota 481.
Con respecto al índice de reposición, durante septiembre se ubicó en 0.76, de manera que por cada bovino comercializado se fue reponiendo menos de un animal. El otro número que preocupa a los feedloteros son los costos de producción.
A la hora de elaborar el margen bruto (utilidad antes de interés e impuestos), el cálculo arroja que por animal estos engordadores pierden 325,40 por animal. Con respecto a los costos de indiferencia, en la categoría gordo se ubica en 52 pesos (sin costo financiero) y 58,50 pesos (con costo financiero), mientras que en el caso de la invernada es de 47,25 pesos y 38,50 pesos, respectivamente.