La industria argentina del biodiesel busca reactivar sus ventas. Con las ventas paralizadas a Estados Unidos y la posible vuelta de sanciones por parte de la Unión Europea, el Gobierno nacional presentó ante la Organización Mundial de Comercio (OMC) una solicitud de consultas a Perú, para saber cuáles fueron los elementos que motivaron a ese país a imponer medidas antidumping y antisubsidios a la importación de biodiésel argentino en octubre de 2016.
De acuerdo a un documento publicado por la OMC, Argentina comenzó este proceso al considerar que "Perú inició la investigación antidumping sin que la solicitud presentada por la rama de la producción nacional incluyera pruebas de la existencia de dumping" y porque dicho país "no se cercioró de que existiesen pruebas suficientes del dumping que justificaran la continuación del procedimiento de investigación".
En octubre de 2016 Perú impuso a la Argentina derechos antidumping que fueron desde el 17% al 31,6%, lo que significó un aumento de 122 dólares 191,6 dolares por tonelada importada. De esta manera, los envíos del producto argentino se vieron paralizados y pasaron de más de 150.000 toneladas en 2015 y 250.000 toneladas en 2014 a solo 5.000 toneladas en 2018.