El paquete de medidas anunciado por el Gobierno nacional para controlar la evasión en las exportaciones de carne sigue generando posiciones encontradas. Por un lado, los exportadores aprueban la decisión, mientras el sector del consumo reclama que los dejaron fuera de juego en el comercio exterior.
Mario Ravettino, presidente del Consorcio ABC, dejó en claro la postura de la industria exportadora. “Los frigoríficos venimos presentando documentación y tenemos responsabilidades”, sostuvo. En el programa Mercadovisión, por la pantalla de Canal Rural, afirmó que las medidas no constituyen “un privilegio de los frigoríficos con respecto a los exportadores que no tienen fábrica, sino que se está equiparando a los que no daban esa información con los que la damos”.
Consultado por la posibilidad de que la normativa se transforme en una medida que controle las intervenciones, el titular del ABC fue tajante: “Conceptualmente, una medida que en algún grado determine una intervención en el mercado, es algo que no me gusta”.
El directivo reconoció que por el momento, las negociaciones para bajar los derechos de exportación no avanzaron. “Cuando empezamos el diálogo, pedimos una reestructuración basada en el concepto de valor agregado”. Este pedido incluía la baja de 44% en el caso de los productos con mayor valor agregado, en un contexto de caída de los precios internacionales.
En este punto, Ravettino admitió que el problema de base es “el impacto fiscal, "la posición de Economía fue férrea”. El directivo calculó que el costo anual de esta medida para el Estado oscilaría entre 45 y 50 millones de dólares.