En el marco del proceso que busca transparentar la cadena comercial bovina argentina, el Gobierno nacional suspendió frigoríficos y una casa consignataria y dio de baja matrículas.. Las acciones fueron llevadas a cabo por la Dirección Nacional de Control Comercial Agropecuario.
En total se suspendieron tres frigoríficos ubicados en La Plata, Junín y Monte Grande, uno de Entre Ríos y una casa consignataria de Córdoba. En el caso de las plantas, se realizaron por incumplimientos relacionados al uso de balanzas electrónicas, incumplimientos de pagos y en la matriculación del Registro Único de Operadores de la Cadena Agroindustrial (RUCA).
Según fuentes oficiales a la que pudo acceder delsector.com, el establecimiento suspendido en Monte Grande es el frigorífico Ganadera Arenales S.A, que según publicita en su sitio web cuenta con una capacidad de faena mensual de 20.000 cabezas.
Desde hace unos tres meses, el establecimiento recibía inspecciones de manera periódica, ante la sospecha de irregularidades en su cadena comercial. Tras un minucioso trabajo de investigación, se descubrió que se abonaba con una demora de 25 días los montos correspondientes al Fondo de Garantía, que habilita la faena bovina.
La suspensión será de hasta 30 días, y desde la Dirección de Control Comercial Agropecuario esperan el descargo de los responsables de Ganadera Arenales. Fuentes de peso aseguran que en esta maniobra del frigorífico podrían estar involucrados inspectores del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA).
En el caso de la casa consignataria, se trata de la firma Daniela Borgogno SRL, con sede en la localidad cordobesa de Morteros y cuyo socio gerente es Ider Peretti, el ruralista de extracción peronista que preside la Sociedad Rural de esa ciudad. El motivo de la suspensión se debe buscar en la falta de pago de aportes y contribuciones a la Seguridad Social durante 2017.