La siembra de soja y maíz en todo el país empezó a demorarse a causa de la falta de lluvias y las elevadas temperaturas, de acuerdo a la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA). En paralelo, la cosecha de trigo avanzó, pero con rindes que hasta el momento se ubican por debajo de los promedios históricos.
En soja, se implantaron 1,5 millones de hectáreas en la última semana, por lo que el avance de siembra se ubica cerca del 60% del área proyectada por la bolsa porteña, que es 17,2 millones de hectáreas. Pero las condiciones de estrés hídrico demoran tanto la siembra de los lotes restantes de soja de primera como los de segunda y los productores esperan lluvias en los próximos días para seguir con su trabajo.
Con respecto al maíz, se avanzó en la incorporación de lotes tardíos del cereal, con una siembra que llegó al 47% de la superficie total para este ciclo, estimada en 6,3 millones de hectáreas. Este cultivo atraviesa una situación similar a la soja, en donde los trabajos de siembra se encuentran frenados por la falta de precipitaciones.