Con un ingreso moderado de 7.167 animales y 9 vacunos de remanente, se dieron los negocios del viernes en el Mercado de Liniers. La demanda, que se logró abastecer durante los días previos, hoy se comportó en forma selectiva y agilidad ante los conjuntos especiales. Para el resto, a excepción de la vaca -por la exportación- y el novillo -por la escasez-, las ofertas estuvieron muy por debajo de lo pretendido por los martilleros, dejando una plaza tranquila.
En la voz de los compradores se escucha nuevamente que la calle está dura y que la suba indefectible de las últimas semanas, golpeó los bolsillos pero los valores actuales -y sus leves oscilaciones-, llegaron para quedarse.
